18 diciembre 2008

Es de madrugada y te llamé

Regresando y renaciendo. No sé como lo haré, pero estoy seguro que te convenceré y no tardaras en volver a ver lo que será un placer, para los ojos que mantienes aun despiertos, rojos, llorosos e incómodos. Es difícil, para ti y para mí, eso ya lo sé, pero todo tiene una recompensa, y llega cuando menos la esperas, a veces te quedas mas pensando en lo que recibirás, que en resolver lo que tienes que hacer de forma correcta, de la mejor manera, y jodes todo.

De lo dulce que pensabas que todo estaba, se tornó amargo, amarillo, áspero al tacto, ya solo queda aceptar lo que viene y tratar de hacerlo mejor en tu próxima oportunidad. Es de madrugada, te llamé, despertaste y te quiero relatar todo hasta el detalle más idiota, para que me entiendas, y logres comprender la desesperación que me invade, que quiere apoderarse de lo que me queda de alma en esta oscuridad absoluta de la noche...el sol, parece que ya nunca volverá. Ahora tus lágrimas se van derramando, y solo quisiera tener eso que te gusta, para poder secarlas, no lo tengo, no lo sé, quisiera que sí, eso lo sabes nada mas tú. No hay nade mejor que dibujar esa sonrisa en tu rostro y solo en la mañana, sin lavarse la cara, es preciso y precioso, algo único, es lo que me fascina de tenerte acá y es vagamente imposible que vuelva y tener una experiencia así en frente.

Ya amanece y no tengo ni un rastro para hallarte, ¿se acabó?, yo sé que no, empieza otro día para poder lograrlo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
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Male dijo...

increible, exactamente lo que me pasa ahorita. Todo se vuelve negro, todos los recuerdos se mezclan en la mente y no sabs que momento todo lo bello se oscureció. El túnel es demasiado largo, y siento tristeza aldedor. Se dice que nunca es el fin, pero todo siempre tiene su final. Seguir, duele, seguir, pero al final y al cabo, amar duele, pero no tanto.
Al final del túnel...siempre hay una luz.